Cuando atravesamos pruebas y tribulaciones en tiempos dif ciles, desilusiones de cualquier tipo y dificultades, debemos orar que Dios el Padre Todopoderoso que envi a Su Hijo Unig nito al mundo nos traiga cosas buenas con Su amor a trav s de Su Hijo Jesucristo. Tambi n debemos hacer uso del valor y de una fe s lida para desear lo mejor del Se or. Cuando nos encontramos desesperados en nuestras situaciones, debemos recurrir inmediatamente a la Palabra de Dios en busca de respuestas y consuelo en las tribulaciones. Debemos encontrar valor para orar hasta que los cielos se abran y Dios responda a nuestras plegarias.